Los frutos del bosque se pueden plantar en primavera. ¿Cómo cuidarlos?


Para cultivar estos pequeños frutos debemos simular la naturaleza. La mayoría de ellos viven en el bosque, así pues deberíamos ofrecer ese ambiente fresco y húmedo.

Lo podemos conseguir así:

-conservando la tierra húmeda con el riego.
-aplicar acolchados a la tierra para conservar su humedad (corteza de pino por ejemplo).
-situar el arbusto entre otras plantas.
– escoger la más adecuada a nuestro clima.
– la maceta más grande que podamos según el espacio que dispongamos en caso de cultivarlas en un balcón, patio o terraza.
– un buen drenaje (ideal añadir a la tierra arena de rio).
– plantarlas de cara norte

¿Cuáles son los frutos del bosque?
Arandanos /mirtils
Endrino / aranyoner
Frambuesa / gerd
Grosella / grosella
Mora / mora
Fresas /maduixes

Las frutas del bosque son más fáciles de cultivar que los árboles frutales ya que se trata de arbustos y no de árboles y para que fructifiquen no necesitan tantas atenciones, ni tanto espacio, ni tantas horas de sol como los árboles frutales.

Plantación: marzo, abril y mayo y también en invierno.

Exposición: Si vivimos en el Montseny deberían estar al sol pero si vivimos en Gavá, por ejemplo, entre sol y sombra.

Riego: debemos regar a menudo cuando la planta florece y fructifica, después reduciremos los riegos considerablemente, así la planta se endurece y descansa.

Tierra: Tierra universal.

Abonos: Para árboles frutales o abonos orgánicos.

Las plantas más adecuadas para un clima mediterráneo litoral son: la mora, la parra y la morera de fruto pues a diferencia del resto de plantas mencionadas anteriormente no necesitan el frescor del bosque y además son resistentes a la sequía, siempre y cuando las cultivemos en plena tierra y no en una maceta. La parra es una planta trepadora de hoja caduca ideal para ofrecer sombra y frescor en verano.